“No se a quién agradecer entre todos los ángeles de Hadassah”, dijo Inbar Azrak de 27 años en el Hospital Hadassah Ein Kerem. Ella y su esposo estaban manejando por un suburbio de Jerusalén cuando les aventaron una bomba molotov al coche. “Escuché una bomba y vi que el coche estaba en llamas. Traté de salir, pero no podía desabrochar mi cinturón. Finalmente me arrastré en el lodo y me di cuenta que estaba muy lastimada, pero me dije a mi misma: “Estoy viva, el dolor pasará y aún estas viva”. Afortunadamente los tres hijos de los Azrak no estaban en auto.

“Una pareja se paró para ayudarnos; nos ofreció agua y me detuvo hasta que llegó la ambulancia”, dijo Inbar. “Desde el momento en que llegamos al Hospital Hadassah Ein Kerem, nos dieron la mejor atención y excelente cuidado”.

Inbar sufre de quemaduras moderadas y está hospitalizada en el séptimo piso de la Torre Sarah Wetsman Davidson en el departamento de cirugía plástica. “Qué gran regalo es tener este hermoso y cómodo cuarto donde mi familia y visitas pueden sentirse a gusto”, dijo ella.

Entre las visitas de Inbar estuvo el Primer Ministro Benjamin Netanyahu y el Presidente de Israel Reuven Rivlin, quienes ambos condenaron los crímenes de odio en los últimos días. También la visitó Dov Kalmanovitz, el teniente de alcalde de Jerusalén, quien también es un sobreviviente del terrorismo que sufrió de quemaduras de tercer grado en un 75% de su cuerpo en el año 1988 después de un ataque de bomba molotov.

Él pasó varios meses en el Hospital Hadassah Ein Kerem recuperándose, pero eventualmente pudo reanudar su vida. “Vine para animar a Inbar y decirle que vale la pena el largo camino”, dijo él.

Casualmente ambos pacientes tuvieron al mismo cirujano plástico, el Prof. Rami Neuman. “Necesitas suerte cuando sufres de un ataque terrorista”, dijo el Prof. Neuman. “A pesar de que el coche de Inbar se prendió en llamas y le ocasionó quemaduras en un 25% de su cuerpo, la mayoría son de segundo grado. Hablando de forma conservadora,  ella debería estar bien y de camino a casa en unas dos semanas. Desafortunadamente, tenemos mucha experiencia en tratar este tipo de quemaduras por explosivos de terroristas. Ella es una mujer encantadora con una hermosa familia y estamos muy contentos de poder contribuir a su recuperación”.

Inbar ha pedido que agradezcan de su parte a todos los miembros del edificio de Hadassah por tener una gran facilidad y apoyar los avances médicos en Israel.