El enfermero de Hadassah Reuven Gelfond está a cargo del quirófano de la Misión Israelí en Filipinas. Relata sus experiencias. Han visto a más de 1500 pacientes desde que llegaron.
“Hoy me despertaron a las 5am para una emergencia de cesárea. La mujer estaba grave, y logramos traer al mundo a un hermoso bebé. La madre y el hijo están bien.” Este es el trabajo cotidiano aquí. Muchos de los casos no son consecuencia del tifón, aunque aun hay pacientes de trauma que resultaron heridos en la tormenta. Somos la presencia de un equipo médico moderno en una zona que no cuenta con medicina del siglo 21. La logística se vuelve aún más difícil por los daños de la tormenta.
Por ejemplo, la joven mujer que tenía un embarazo ectópico. Tenía una hemorragia. Llegar al hospital más cercano le habría tomado horas. Era una cuestión de vida o muerte. Por suerte, estábamos aquí para salvarla. Los pacientes hacen filas para vernos. Muchos están muy contentos tan solo de poder consultar a un médico o algún enfermero. Hemos hecho muchas cirugías de ojos. Con los instrumentos que hemos logrado reunir y con los que trajimos de Israel, hemos ayudado a muchos pacientes que no veían a recuperar la vista. Esto es tan poderoso.
Aprendimos mucho en Haití. Al haber vivido una situación similar, ahora estamos mejor preparados. También desde una perspectiva personal. Yo duermo en una casa de campaña. Hace mucho calor, soy de la Georgia Soviética, pero me he acostumbrado al calor y a las condiciones del campo. Tenemos una gran motivación de ayudar. Es un sentimiento maravilloso y es una gran alegría ser parte de un equipo que ha tomado esta iniciativa.
En Haití me di cuenta que la esterilización era muy difícil. No logras nada si haces una cirugía exitosa pero el paciente se muere por una infección. Ahora trajimos todo lo necesario. Yo insisto que tengamos el mismo nivel que tenemos en Hadassah en Monte Scopus.
Estaba de vacaciones en el Mar Muerto cuando recibí una llamada telefónica. Tenía una hora para presentarme con la delegación. Así es para todos nosotros. Estamos dispuestos a dejar todo para servir a nuestro país y ayudar a los que lo necesitan. Esos somos nosotros.
Hoy tuvimos un día completo de cirugías, de todas las que te puedas imaginar. Eramos una operación sin fin.
Discúlpame, me tengo que ir. Hay otra emergencia en la sección C. El día comenzó con una nueva vida y termina con otra nueva vida. Mujeres y niños que podrían haber muerto si no estuviéramos aquí. ¿ Qué puede ser más importante ?
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