“Mi sueño es que todos los pacientes incapacitados de Israel crean que Hadassah es el mejor lugar para ellos”, dijo la Dra. Isabella Schwartz, Directora del Departamento de Medicina Física y Rehabilitación en el Hospital Hadassah de Monte Scopus.
Nacida en Siberia, lugar al que llegaron sus padres desde Kiev, cuando eran niños, durante la Segunda Guerra Mundial; la Dra. Isabella Schwartz vino a vivir a Israel después de haber estudiado medicina. Comenzó su residencia en el Centro Médico Hadassah y se especializó en rehabilitación. “Hadassah es donde empecé mi profesión y se convirtió en mi segundo hogar”.
Para la Dra. Schwartz, la medicina de rehabilitación es un viaje. El acercamiento a los pacientes es comprensivo y holístico. El equipo multidisciplinario de rehabilitación, compuesto por médicos, enfermeras, terapeutas, terapeutas ocupacionales, terapeutas de habla, psicólogos, trabajadores sociales y nutriólogos; abordan todas las necesidades de los pacientes desde un punto físico, psicológico y social. El paciente, el personal y sus familias, forman una comunidad y se convierten en una grande familia. Por esto mismo, la Dra. Schwartz dice que la investigación de rehabilitación siempre es muy personal.
El equipo de rehabilitación investigas las intervenciones específicas que pueden restaurar la movilidad de los pacientes de la mejor forma, así como las funciones sociales y cognitivas. Por ejemplo, reportó ella, el personal atendió a víctimas de terrorismo e individuos que sufren graves heridas de trauma como resultado de accidentes de coche y similares. Su investigación reveló que las víctimas de terrorismo necesitan estar más tiempo en tratamiento, pues tienen más complicaciones y generalmente sufren de efectos secundarios tanto físicos como psicológicos. Como consecuencia, las víctimas del terrorismo necesitan atención por un periodo de tiempo más largo.
Una de las pacientes que visitó la Dra. Schwartz, es una joven víctima del terrorismo. Las piernas de la muchacha fueron terriblemente golpeadas con fragmentos de metales interpuestos entre sí. También sufrió de múltiples fracturas de hueso. La muchacha estuvo más de 10 horas en cirugías. “Los cirujanos ortopédicos y vasculares de Hadassah salvaron su vida”, dijo la Dra. Schwartz. Cuando llegó a la unidad de rehabilitación, estaba completamente angustiada y sus esperanzas destruidas. Al principio no podía mover sus piernas, pero poco a poco fue progresando, a pesar del síndrome de estrés postraumático que desarrolló. Eventualmente pudo regresar a la escuela y obtener su título; incluso también se casó. “Cada año viene a Hadassah para agradecernos”, dijo la Dra. Schwartz.
El éxito de Hadassah “tiene un impacto en las víctimas del terrorismo de todo el mundo, ya que publicamos nuestros descubrimientos”, dijo la Dra.
El departamento de rehabilitación también analiza el impacto de los dispositivos con mecanismo de robótica en los pacientes que están teniendo problemas para caminar. El equipo ha encontrado, por ejemplo, que el Lokomat (sistema de robótica que incluye arnés, caminadora especializada y un sistema mecánico que moviliza las piernas de los pacientes), combinado con terapia física tradicional, ha ayudado a los pacientes que tienen dificultades severas para caminar por sí solos. Víctimas de derrames, individuos con esclerosis múltiple y aquellos con problemas en la columna vertebral, que no podían caminar antes del tratamiento, ahora pueden caminar por sí solos.
Una mujer joven que se ha beneficiado por el laboratorio de marcha, fue víctima de una hemorragia cerebral. Cuando fue transferida a la unidad de rehabilitación, no solo no se podía mover, sino que tampoco podía comunicarse, excepto con su esposo, a través de gestos o movimientos con los ojos. Con la ayuda del equipo de rehabilitación de Hadassah, un año después ya podía hablar. Sin embargo, su habilidad de caminar todavía estaba muy limitada. Después de varias evaluaciones y tratamientos, incluyendo inyecciones para reducir la espasticidad y el uso de un aparato ortopédico para ayudarla a poner peso en su pierna, todavía no podía caminar por sí sola.
Recibió otra evaluación del departamento en el laboratorio de marcha y decidieron que necesitaba otra cirugía para corregir sus tendones y músculos, para así permitirle poner suficiente peso en sus piernas. ¡Ahora camina de manera independiente!
El sueño de la Dra. Schwartz es crear programas específicos para cada población con discapacidades crónicas, así como aquellas por parálisis cerebral. Su objetivo es poder satisfacer sus necesidades y crear planes personalizados para restaurar sus habilidades. Hasta la fecha, Hadassah ha desarrollado tres programas del estilo, un centro para pacientes post-polio, un centro para la rehabilitación de los pacientes con esclerosis múltiple y el laboratorio de marcha. “Con la ayuda de los donantes de Hadassah, creo que podríamos ayudar a todas las personas con discapacidades en Israel”, dijo ella.
Actualmente el departamento de rehabilitación atiende a 450 pacientes anualmente y 100 pacientes por semana en el programa diurno. “La medicina de rehabilitación es única y es más que una medicina”, dijo la Dra. Schwartz.