La semana pasada, el cuarto de Oron Ronen en la Torre Sarah Wetsman Davidson estaba lleno de dulces, fruta y pequeños aparatos eléctricos.
Todos estos fueron regalos para los soldados heridos en la reciente misión de defensa en Israel: Operación Margen Protector. Después de estar dos semanas en Hadassah, finalmente está listo para irse a casa.
Oron estaba en una pelea de fuego con un grupo de terroristas en Gaza, cuando sintió que algo lo golpeo, pero el siguió peleando. Fue después que notó toda la sangre. “La adrenalina debe hacerlo”, dijo Oron.
Cuando Oron llegó a Hadassah tenía un agujero de bala en su hombro, una herida bastante fea. Ziv Ronen, el papá de Oron dijo: “En mi opinión, Hadassah es el número uno del país; he estado en varios hospitales alrededor del mundo y ninguno se compara con este”. El señor Ronen es un agrónomo que vive en el norte en Kfar Yehezekel.
“Nos vamos con el teléfono del Prof. Iri Liebergall (Director de Ortopedia) en mi bolsillo; el Prof. Me pidió que lo llame Iri, ¿qué puede ser mejor que eso?”, dijo el señor Ronen.